Hace unas semanas os dábamos algunos consejos para crear ambientes exóticos en casa. Colores, materiales, objetos... todo ayuda a decorar una estancia especial. En este artículo queríamos introduciros las características perfectas para tener un ambiente relajado en cualquier parte de nuestras casas, pero hemos pensado que nos vamos a centrar en la parte de nuestro hogar que más paz necesitamos que transmita: el dormitorio. El dormitorio es el lugar de descanso. Tiene que estar siempre ordenador, ventilado y preferiblemente sin muchos aparatos eléctricos ni plantas - por aquello de la absorción del oxígeno -. Con todo esto conseguiremos que se dé la atmósfera necesaria para un buen descanso. Si además, quieres conseguir que tu dormitorio sea Zen, sigue estos pequeños consejos: Colores y tonos: las estancias relajantes necesitan de colores y tonos suaves; principalmente el blanco. Neutros como el ocre, el gris o el beig también son muy utilizados, aunque también suelen usarse colores pastel como el rosa o el violeta. Si queremos aportar algo más de color a la estancia, optemos siempre por tonos que nos evoquen a la naturaleza. ambientes relajados Materiales: este tipo de decoración utiliza materiales naturales; tanto en textil como en mobiliario. Maderas sin mucho tratamiento, hilos y yute son los que más destacan. Iluminación: la luz en el dormitorio zen es muy importante. Evitemos siempre la luz directa, y optemos por luces ténues y que aporten calidez a la estancia. Muebles: pocos y de líneas sencillas. Un elemento característico en un dormitorio zen es el cabecero; siempre apoyado en la pared y con un toque oriental. Elementos a evitar: como ya comentamos arriba, hay que evitar los aparatos eléctricos, televisores, aparatos de gimnasia, ordenadores,... o cualquier otro elemento que pueda perturbar la energía. La palabra Zen en la antigua lengua oriental, significa "meditación". Si queremos un dormitorio o cualquier estancia en casa dignas de llamarse así, cuidemos la energía y el equilibrio, y consigamos crear esa atmósfera de relajación necesaria. ¿Os animáis a montar vuestro dormitorio Zen? ;)