El Salón.

El tamaño de la alfombra dará cohesión visual a los espacios. Un suelo vacío puede dar sensación de que los muebles flotan, una alfombra bien seleccionada llenará el espacio y creará áreas definidas para ocio, trabajo o relax.

El comedor.

Tienes que tener en cuenta que sea lo suficientemente grande para que cuando eches la silla para atrás, siga sobre la alfombra, sino puede resultar incómodo.

El dormitorio.

Rodéate de calidez y color en las habitaciones. Pon una alfombra grande creando un perímetro alrededor de la cama poniendo dos terceras partes debajo de la cama. Una alfombra mullida te dará una sensación agradable a los pies mientras creas un ambiente acogedor.