Existen muchos tipos de madera en el mundo. Muchas son sus clasificaciones: por país de origen, composición, texturas,... La madera forma parte de nuestras vidas cotidianas. Nuestra casa o nuestro trabajo está hecho en parte o completamente de este material. Nuestros hijos juegan con juguetes hechos de madera, en la cocina utilizamos utensilios de madera, nos sentamos en sillas de madera, escribimos con lápices de madera,... como vemos, los usos de este material son infinitos. Las propiedades de la madera son: la resistencia al corte o dureza, la flexibilidad, la hendibilidad, la duración, la resistencia, la homogeneidad y la densidad o peso específico. En cuanto a sus cualidades, es importante que conozcamos qué tipo de madera tenemos entre manos y sus posibilidades, dependiendo del uso que vayamos a hacer de ellas: si vamos a fabricar un mueble, una puerta o un objeto decorativo. Por estas razones podemos distinguir entre varios tipos de madera:
  • Bubinga: este tipo de madera no es muy conocida. Dura de color pardo rojizo y grano muy irregular. Sus usos más frecuentes son el chapeado y la elaboración de muebles y utensilios.
  • Castaño: madera dura de color marrón claro. Es semejante al roble, aunque de dureza media, elástica y fuerte. Su uso más frecuente es para mobiliario de cocina, sobretodo para puertas. Debido a su abundancia, u uso en España es muy frecuente.
  • Cerezo: de color rosado, es una madera muy apreciada para trabajos de mobiliario de interiores. Es una madera muy decorativa, pero propensa a la carcoma y a sufrir alteraciones de color. Es de origen nacional aunque también es muy común en América.
  • Fresno: madera dura pero que tratada puede llegar a ser muy flexible. Su color es amarillo claro, en ocasiones agrisado o rosado. Se utiliza mucho en ebanistería y en la elaboración de artículos curvos: mangos para herramientas, instrumentos agrícolas, chapados, contrachapados...
  • Haya: madera muy de moda en los hogares españoles. Una curiosidad: existen dos tipos de haya: la americana de color blanquecino, y la europea y más conocida por nosotros, de color pardo amarillento. Se usa en la fabricación de muebles y, en especial, para elementos torneados de uso doméstico, como mangos de herramientas, muebles o juguetes.
  • Nogal: igual que con el haya, podemos distinguir entre nogal blanco americano - de color blanco grisáceo- y el nogal europeo -de color pardo grisáceo y vetas oscuras-. Se utiliza en muebles, ebanistería y elaboración de artículos torneados.
  • Pino: es la madera más utilizada hoy en día debido a su precio, calidad y dureza. Su color oscila entre el amarillo y el blanquecino roble. Un dato curioso: el pino en la antigüedad era el material preferido para la construcción de muebles destinados a las iglesias.
  • Roble: es una madera resistente, duradera y compacta. De color pardo amarillento, tiene muy marcado los anillos de crecimiento y cambia de color al entrar en contacto con el hierro. Se utiliza en la fabricación de muebles de calidad. Es una madera nacional de uso muy frecuente, desde trabajos de ebanistería de interior hasta carpintería de exterior, entarimados, tallas o tornería.
  • Teca. Es una de las maderas que mejor se adapta al clima, por esa razón es el material preferido por mucho para exteriores y terrazas. Si se cuida bien y se la trata con su aceite, tiene un alto nivel de impermeabilidad. En ocasiones también se utiliza su madera para interiores de estilo oriental. De color oscuro, suelen predominar las maderas de color pardo, dorado uniforme o marrón medio, junto con vetas oscuras y olor a cuero.
Esperamos que entre todos, hayamos aprendido un poco más sobre los tipos de madera que existen y su apasionante mundo. ¡Hasta la semana que viene!