Las mascotas son compañeros que benefician psicológicamente ya que aportan tranquilidad y buenos sentimientos.

  Aumentan los sentimientos de felicidad. Reducen significativamente el estrés. Son un reforzamiento de la autoestima. Ayudan a eliminar la sensación de soledad y la depresión. Mejoran la vida social y contribuyen a implementar fórmulas personales de responsabilidad.   Estas son algunas de las características más importantes que reúnen las mascotas.   Los animales que forman parte de la vida cotidiana de las personas, ayudan significativamente con muchos aspectos, principalmente afectivos, y son un beneficio importante que aporta salud mental y por supuesto bienestar.   Los seres humanos desarrollan una empatía característica hacia los seres vivos, esto inclusive tiene mucho que ver con algunos aspectos fisiológicos relacionados con el contacto. Un ejemplo de ello es que existe una sustancia llamada oxitocina, que según los estudios científicos se libera cuando se está en contacto con gatos y perros. Esta hormona se relaciona mucho con el placer y ayuda a bajar los niveles de cortisol en la sangre, que se presentan ante episodios que generan estrés.   Sin embargo, al decidirse por tener una mascota en casa, es importante tener en cuenta algunos aspectos importantes que van a ayudar no solo a que la convivencia de los animales en casa sea agradable y beneficiosa, sino que ayudará también a estos animales a que vivan de una forma cómoda y placentera.   Un aspecto importante es el tiempo en que las mascotas están en casa, esto referido directamente a los lugares destinados para ellas. Una recomendación es que las mascotas tengan sus propios espacios, así como camas fabricadas exclusivamente para ellas, o grandes almohadones y lencería hecha exclusivamente para que esos compañeros tengan una estancia libre de alergias o de incomodidades.  

Los gatos y perros deben tener su propio espacio y muebles que les permitan sentirse cómodos y seguros.

  Las mascotas pueden significar un problema cuando se les deja subir a las camas o a los muebles que están en una estancia. Dejar que las mascotas descansen en algunos muebles puede hacer que estos sufran un deterioro progresivo, entre otras cosas porque pueden deformar partes de un mobiliario, romperlos con sus uñas, o hacer que el mueble sea foco de suciedad, dado que los animales desprenden también fluidos corporales, que en muchos casos sirven para que el sucio se adhiera de forma rápida causando manchas o decoloraciones.   En el caso de que las personas decidan que las mascotas utilicen los mismos muebles que sus dueños, hay que tomar en cuenta algunos aspectos. Uno de estos es elegir un tejido adecuado que impida que el peso de las mascotas deterioren los mobiliarios, y que ayuden además a evitar arañazos y pérdidas de color. En este sentido, hay tejidos para los muebles que pueden ser repelentes a manchas y olores, además de contar con un sistema impermeable, lo cual resulta muy eficaz para que las mascotas estén en ellos.   Los muebles tapizados en piel también pueden servir para que las mascotas suban a los sofás, ya difícilmente la piel atrapa el pelo de las mascotas y los hace mucho más resistente que las alternativas sintéticas, además la piel no se mancha con facilidad, sin embargo es importante que las mascotas tengan sus uñas rebajadas, ya que un pinchazo sí puede romper la tapicería.   Las telas de microfibra pueden funcionar eficazmente, ya que muchas no se rompen ni sufren arañazos, y para recoger todo el pelo que los gatos y perros dejan en los muebles, una aspiradora o una sacudida con algún cepillo puede ser suficiente. Los tejidos sintéticos también son más fáciles de lavar, por lo que son mucho más cómodos a los momentos de hacer una limpieza profunda de los sofás.   Es fundamental saber que hay algunas telas que no resultan beneficiosas en contacto con los animales. La lana, el terciopelo y la seda son tales de estos elementos, ya que se manchan o se rompen con facilidad, además que algunas no son resistentes a la humedad.  Se recomienda que este tipo de telas tampoco estén en contacto con las camas de las mascotas, ya que su durabilidad es muy corta cuando están en contacto con estas, y pueden causar alergias.  

Algunos sofás pueden sufrir deterioro si las mascotas los usan como muebles lugares frecuentes para dormir o jugar.

  Las mascotas pueden tener momentos donde ante la ausencia de sus dueños utilizan algunos objetos de la casa o muebles como juego. En este sentido, el adiestramiento con personal calificado puede ser una alternativa válida, ya que el animal adopta costumbres y parámetros, y con esto se evita que puedan deteriorar los objetos de la casa.   Es evidente que las mascotas ayudan a una vida mucho más armoniosa y placentera, pero es necesario también atender sus necesidades. Sacarlos a pasear es importante, ya que también incrementa su actividad física y los ayuda a mantenerse despiertos y sanos.